Con ojos de niño

Qué mirar no sea sólo ver!! Cómo sería mirarte con los ojitos de un niño? Te verías tal cual eres desde el alma pura y limpia, que no sabe de rencores, tampoco de competencias, pero sí de desafíos y hasta de poca prudencia. Pues todo quiere saber y sin mucha explicación porque en su enorme visión para él es muy sencillo enfrentar algún conflicto y encontrarle solución. Y mirarte con asombro y no acertar a entender cómo un adulto no puede un conflicto resolver. Y cuando estás abatido y ya no sabés qué hacer es la mirada del niño la que te hace renacer y te dice que es posible, y que necesita saber que renovarás tus fuerzas para ayudarlo a crecer. Y cesará la tormenta y te ayudará a ver el cielo, otra vez celeste, el sol con su calidez. Te tomará de la mano y recordarás lo bien que se siente, y al mirarlo, a las raíces volver, y así podrás abrazarlo para juntos recorrer el camino que has soñado y sin temor a caer. Porque vas a comprender que hay pied...